San Lorenzo fue diácono en la Iglesia cristiana primitiva, sirviendo bajo el Papa Sixto II en el siglo III. Fue conocido por su caridad hacia los pobres y su devoción a Cristo. El 10 de agosto celebramos su fecha conmemorativa.
Una historia que se cuenta a menudo sobre San Lorenzo es como el emperador romano Valeriano le pidió que produjera los tesoros de la Iglesia. Lorenzo reunió a todos los pobres y enfermos que cuidaba y los presentó al emperador, declarando que estos eran los verdaderos tesoros de la Iglesia. En respuesta, Valerian ordenó que Lawrence fuera ejecutado.
Mientras lo quemaban vivo en una parrilla, Lorenzo dijo la famosa frase: "Dame la vuelta, ya terminé de este lado". Permaneció firme en su fe y confianza en Dios, incluso frente a la muerte.
En este día, honramos a San Lorenzo y pedimos tu intercesión. Oramos para que nosotros también podamos estar llenos de caridad hacia los pobres y que podamos tener el coraje y la fe para permanecer firmes en nuestras creencias incluso frente a la persecución o las dificultades. Recordemos que el verdadero tesoro no está en las posesiones materiales, sino en el amor y cuidado que mostramos a los demás.
San Lorenzo, ruega por nosotros. Ayúdanos a ser generosos y desinteresados, a servir a los necesitados con alegría y compasión. Que siempre confiemos en el amor y la misericordia de Dios y estemos dispuestos a dar nuestras vidas por nuestra fe. Amén.